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| El Parque Natural de Sierra María |
En el entorno semiárido del sureste peninsular, Sierra María constituye un enclave privilegiado, pues posee una de las masas forestales mejor conservadas de toda la provincia de Almería. Las elevadas altitudes, que superan los 2000 metros, provocan un aumento de las precipitaciones; en Sierra María se alcanza la máxima pluviometría Provincial, con una media de 471 litros por metros cuadrado anuales.
Sobre sus terrenos calcareos se desarrollan extensos pinares de pinos carrascos, que dominan las laderas de la Sierra. En realidad, estos pinares han venido a sustituir a los bosques autóctonos, qué están formados mayoritariamente por encinares. En las umbrías y en suelos más profundos encontramos arces y quejigos, y en las mayores altitudes, sabinas, enebros y pinos negrales, laricios y silvestres.
La importancia del Parque Natural de Sierra María, como núcleo de concentración de fauna, adquiere una relevancia especial si se tiene en cuenta el entorno altamente deforestado en que se encuentra.
Una isla ecológica
Sierra María es una auténtica isla ecológica para ciertas especies de animales. Los vertebrados, y en particular las aves, constituyen los grupos más importantes de la Sierra. En total se han catalogado 106 especies de aves, de las que 52 son sedentarias y el resto migradoras.
Las rapaces encuentran un seguro refugio en este espacio protegido. En Sierra María se pueden observar desde las grandes rapaces, como águilas reales o culebreras, hasta los pequeños alcotanes, cernícalos y gavilanes.
Los mamíferos son también abundantes. Los depredadores están representados por el zorro, el tejón, la gineta y la comadreja. Los roedores constituyen su principal alimento, sobre todo las ardillas, lirones caretos y conejos.
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